Ayer hablando con una amiga:
Yo: hace mil que no actualizo el blog, es que mis entradas son muy deprimentes...
Ella: Pues a mi tus entradas me gustan, me dan que pensar
Yo: pues seguiré escribiendo sólo por ti
Ella: no, escribe POR TI
Así que hoy renace ROZANDO EL CIELO, un blog imperfecto pero lleno de sentimientos (ya sean buenos o malos), ya que son mis sentimientos, es lo que yo siento y si no estoy animada...no puedo pretender que mi blog lo sea...haré lo mejor que puedo para mis seguidores pero sobre todo para mí, la única persona a la que de verdad le tiene que gustar el contenido de este blog. Y como lo prometido es deuda querida "trucha"
Sus ojos son del color del café, no podría ser de otra forma, ya que al igual que la bebida un sólo "sorbo" de ellos me dan energía para sonreír todo el día. Sus cejas, ¿qué podría decir yo de sus cejas? las amo, amo la forma en que se elevan cuando se sorprende, o su increíble habilidad para alzar sólo una (imposible para mí)... y sus labios...son los que toda supermodelo/actriz/mujer rica...etc paga a un cirujano para tener. Tampoco me olvido de su sorprendente habilidad o torpeza, como quieras verlo, para no poder cerrar un sólo ojo si su boca no está abierta...¿y qué me dices de su sonrisa? y aún mejor, ¿de su risa? ese ritmo de 2, 2, 3 que nos hace reír a todos. Su pelo es una casada, cada vez más larga que cae sobre sus hombros, ¡Cómo me encanta estirar sus rizos! me encanta ver como vuelve a su "posición inicial" y repetir, repetir, repetir...Y ya no hablemos de su cuerpo, el sueño de toda adolescente...sin embargo ella no parece consciente de que todas si pudiéramos nos cambiaríamos por ella...es esa sencillez en la belleza, esa sonrisa, esa risa, esos gestos, ese lenguaje secreto, su manera de quererme...lo que hacen que valga la pena levantarse e ir a clase con una sonrisa aguantando el chaparrón de las millones de cosas que se nos caen encima a los adolescentes, a ti, "trucha", gracias
No hay comentarios:
Publicar un comentario